Puskas

Lo más importante es que está comiendo. no es un devorador nato, lo que le gusta es tener comida a disposición e ir picoteando de vez en cuando, pero al final se come una ración amplia al día y no ha vomitado una sola vez desde que vino a casa el miércoles pasado, así que estamos contentos. También come lata, pero no le entusiasma, prefiere el pienso kitten. La malta sí que le vuelve loco.

En cuanto a carácter, es un gato hiper dependiente. Necesita estar con alguien todo el rato. En cuanto te pierde de vista, empieza a lanzar gemiditos. Es parlanchín, pero no maúlla, solo lanza gritos, gemidos y ruidillos varios. Le gusta tumbarse a tu lado o encima. De momento es tímido y muy tranquilo y aún se asusta un poco si alguno de nosotros o los gatos hacen algún movimiento brusco o ruido fuerte.

Quiere hacerse amigo de todo el mundo y el resto de gatos, que son un poco rancios, le bufan. Pero como comparte habitación con Atalanta ahí la cosa ha empezado a mejorar y yo creo que en unos días serán inseparables.

Se deja coger en brazos, acariciar, achuchar… el pobre es un buenazo. no sé si le cambiará un poco el carácter a medida que se sienta más confiado, pero de momento es como un peluche, se deja hacer de todo.

Está soltando mucho pelo así que le hemos cepillado un par de veces. No sé si será por el estrés que ha pasado, pero parece que ahora lo empieza a tener más suave y menos roto y se lo limpia con frecuencia.Es un gato enorme, así que cuando coja peso y se ponga en algo más normal (ahora se le marcan los huesos que da pena) va a ser un señor gato.